Y así cada día, entre los favores y fervores conseguidos de su presa, descansaban como una historia romántica, mientras su mirada anhelaba los ojos de un nuevo trofeo.
Él cazaba.
Más relatos en blanco y negro en Molí del canyer
Y así cada día, entre los favores y fervores conseguidos de su presa, descansaban como una historia romántica, mientras su mirada anhelaba los ojos de un nuevo trofeo.
Él cazaba.
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¿Acabó siendo el cazador cazado?
ResponderEliminarAbrazo.
Qué giro has dado a una imagen que podría ser la de dos enamorados, y en esta ocasion has descrito aún cazador de presas de mujeres . Muy bien ese giro.
ResponderEliminarUn besote, feliz resto de semana.
Esos cazadores a los que el cine les dio tanta fama y tantos imitadores, has resuelto la propuesta de forma novedosa y original. Unos abrazos
ResponderEliminarUn lobo con piel de oveja, muy buen enfoque para aquella fotografía tan cotidiana.
ResponderEliminarBesos dulces.
Dado el blanco y el negro de la foto, lo hacia con ventaja. Casi con todo a favor.
ResponderEliminarHay muchos de esa especie. Lamentablemente. Esperemos que esa víctima logré dar el salto para liberarse antes que el cazador le de su zarpazo letal. Un abrazo
ResponderEliminarEl delirio por la caza tan propio de la mente inmadura o mal educada. Es más monótono el desfile de personas conocidas a nivel superficial que el centrarse en profundizar en una (o en las que sea pero sin ambiciones estadísticas o cinegéticas). El caso es que ahora miro la foto y la veo como has querido que la vea.
ResponderEliminarLe has dado un giro a la imagen bucólica que me he quedado descolocada, es curioso como cambia la visión de una imagen dependiendo de quien la describe. Muy bueno, besos.
ResponderEliminarNo se. Me ha generado muchas dudas. Todo cazador necesita una presa y, si no hay presas, no tiene nada que cazar. ¿Ingenuidad? ¿Necesidad?
ResponderEliminarestos cazadores no les vendría mal alguna vez ser la pieza a cazar, se le bajarían los humos, Un abrazo
ResponderEliminarSe ven tan enamorados, y tu le pusiste ese toque de mirar bien, que no todo es lo que parece...
ResponderEliminarSaludos :)
Un relato que muchas veces suele ser verdad, sobre todo en los hombres, es realmente una lastima
ResponderEliminarCaza porque algo le falta, sin tener en cuenta todas las presas heridas que va dejando a su paso.
ResponderEliminarBesos.
Menudo elemento el cazador! Has sabido captar esa mirada pícara de la foto y de ahí nos has mostrado todo un personaje! Un abrazote Sylvia!
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